Historia de Buitrago del Lozoya


Referencia histórica

    Buitrago se halla situado en el Km 75 de la carretera N-I Madrid-Irún, en el corazón de la Sierra Norte, y a 975 mts de altitud. Se halla rodeado por el río Lozoya y por un entorno natural que aún conserva las características propias de ecosistema de la Cordillera Central.

HISTORIA: ORÍGENES.

    El nombre de Buitrago es de origen céltico, por lo que atendiendo a su significado, parece ser que se trataba de un predio perteneciente a un señor, a modo de feudo.

    Por otro lado tenemos referencias escritas, de la conquista de la plaza por el pretor Cayo Flamingo en el año 190 a. de J.C. Esta referencia es del historiador Tito Livio y llama a la población Licabrum.


ÉPOCA VISIGODA Y DOMINACIÓN ÁRABE:

    Sobre el paso de los visigodos por Buitrago sabemos por los restos arquitectónicos y culturales que nos legaron por ejemplo: la muralla árabe, parte del alcázar, la red de acequias para el riego de los campos, el Tribunal de Aguas en la Iglesia de San Antolín (hoy desaparecida).
LA CONQUISTA CRISTINA. ETAPA BAJOMEDIEVAL:

     En el año 1085 el rey castellano Alfonso VI conquista a los musulmanes el Reino de Toledo, en el que estaba enmarcado Buitrago. Ya desde este momento, y más concretamente desde el año 1096, los reyes favorecieron la repoblación de esta comarca y potenciaron su economía, dada la situación estratégica.

    Entre otras actuaciones vamos a citar como más importantes:

Buitrago y su tierra fue dado en señorío a la familia Mendoza, aunque no esté muy clara la fecha exacta. Se conoce un documento del siglo XIV de confirmación del señorío por parte de Enrique II a D. Pedro González Mendoza, al que se considera como primer señor de Hita y Buitrago.

La vinculación a esta importante casa potenció el papel histórico de Buitrago, sobre todo en el siglo XV con la figura de D. Iñigo López de Mendoza, primer Marqués de Santillana y gran benefactor de esta villa. Aquí se reunía con otro hombre de letras que generalmente residía en Torrelaguna: Juan de Mena. El rey Juan II fue invitado por el Marqués a residir un tiempo en Buitrago.

Otro personaje Real que residió durante su niñez en el alcázar fué la infanta Juana llamada la "Beltraneja", aunque fue su tía Isabel la Católica la que lo ocuparía. Por aquellos años contaba Buitrago con una importante judería, que usaba para el culto dos sinagogas, también tenía su propio hospital y un osario, además de contar con carnicerías propias. Entre los Oficios de los judíos destacaban: Mayordomo, físico y cirujano, sastre, boticario, tejedor, platero, etc. Tras la expulsión decretada por los Reyes Católicos, muchos de estos judíos, convertidos, regresaron a Buitrago.


EDAD MODERNA Y CONTEMPORANEA:

 

A partir del siglo XVI Buitrago se afianza como capital comarcal. Aquí se centralizan los servicios y la vida comercial. Vuelve a ser visitada por reyes, esta vez atraídos por su riqueza cinegética. La gran cantidad de ganado ovino daba multitud de empleos a pastores, esquiladores, y también para el lavado e hilado de las lanas. Este producto primario de la oveja generó una pequeña industria textil capaz de exportación.

Las distintas dedicaciones laborales de los buitragueños y serranos de la época eran: oficios artesanales (sastres, tejedores, pergamineros, zapateros, cereros...), comerciantes, además de hombres con oficios científicos (médicos, cirujanos y boticarios) y maestros y funcionarios, empleos derivados de la ganadería, labradores, etc..

En Buitrago predominaban los sectores secundario y terciario, y en los demas pueblos el primario.

Todo este desarrollo se vio truncado por el paso de las tropas napoleónicas, que arrasaron Buitrago, diezmando su población. Y de nuevo su estratégica situación hace que durante toda la Guerra Civil el famoso Frente de Somosierra quede ubicado aquí.


Ramiro Moreno